4 receta de pesto casero

Cuando descubres lo extremadamente sencillo que es preparar salsas caseras, y que además puede darle el toque de sabor que más le gusta, definitivamente dejas de comprarlas preparadas para siempre. A nosotros nos ha pasado justamente eso, y tienen la culpa salsas como ésta.

La salsa pesto es una salsa súper aromática y facilísima de preparar, aunque debemos reconocer que algunas veces la hemos comprado ya lista cuando la albahaca no está en su mejor momento, pero está claro que en verano siempre 100% casera. De hecho aquí podéis ver nuestra planta, que ha estado hermosísima hasta que el frío ha llegado:

La albahaca junto con los piñones, el ajo, el queso y por supuesto el aceite de oliva son el alma de esta salsa que se puede utilizar típicamente para la pasta, pero que queda igualmente genial con patatas, verduras, carnes e incluso pescados.

Al ser una salsa que está más rica cuanto más reposada esté, te recomendamos que prepares una gran cantidad, el doble o el triple de lo que te indicamos en la receta, para que tengas siempre un buen bote a mano que va a saberte a gloria, sobre todo esos días en los que no tienes tiempo para cocinar, y apenas cociendo pasta y añadiéndole la salsa tienes un plato casero riquísimo, como nuestros tagliatelle con salsa pesto casera.

Si te gusta elaborar salsas caseras, pásate por nuestra sección de salsa y guarniciones y quédate con las recetas que más te gusten. Que no te falta la salsa brava o la salsa barbacoa, ideales para patatas y carnes, al igual que la salsa a la pimienta verde, la salsa de champiñones o la salsa roquefort, muy típicas en los platos de solomillo y filetes. Y para la pasta, fundamental la salsa bechamel casera, y con un toque de originalidad, la salsa verde de aguacate.

Si quieres salsas para las ensaladas, la salsa de mostaza y miel y la salsa tártara son ideales, y si quieres un toque exótico, decántate por la clásica salsa agridulce china, o la salsa teriyaki japonesa.

Ingredientes para la receta de la mejor salsa pesto, casera y fácil (para unos 250 gr de salsa):

• 100 gr de hojas de albahaca fresca.
• 1 diente de ajo.
• 40 gr de piñones.
• 20 gr de perejil fresco.
• 1 cucharadita de sal gorda.
• 40 gr de queso Parmesano o Grana Padano en bloque (nosotros hemos utilizado éste último).
• 50 gr de aceite de oliva virgen extra.

Preparación, cómo hacer la mejor salsa pesto, casera y fácil:

1. Nuestra recomendación es que la tengas lista al menos desde el día anterior al que quieres utilizarla para que se mezclen bien los sabores, aunque si la vas a preparar el mismo día también te va a quedar riquísima.
2. Aunque se puede utilizar un mortero, tu brazo se va a resentir bastante. Te recomendamos una batidora o picadora eléctrica, la tendrás lista en poquísimos minutos 😉
3. Retira los tallos y lava las hojas de albahaca, sécalas y ponlas en la picadora, y haz lo mismo con las hojas de perejil. Tritura durante unos pocos segundos hasta que la mezcla quede totalmente machacada. Verás que, como nosotros estamos elaborando poca cantidad, algunas hojas pueden quedar pegadas a las paredes y sin triturar, por lo que con una cuchara puedes ir moviendo lo que se queda en las paredes para que se triture con el resto.
4. Ahora pon el ajo y tritura de nuevo.
5. Añade los piñones y la sal, y vuelve a triturar.
6. Haz lo mismo con el queso y procura que quede todo bien triturado. La pasta obtenida se parecerá a un paté, ligeramente grumosa pero con los ingredientes bien mezclados.
7. Retira a un cuenco e incorpora el aceite y mezcla con ayuda de una cuchara. Deja reposar idealmente desde al menos el día anterior, y procura que en la parte superior siempre haya una capa de aceite para que se conserve bien.

Tiempo: 10 minutos

Dificultad: fácil

Sirve y degusta:

La mezcla de esta salsa casera con por ejemplo una buena pasta tipo tagliatelle hacen que este plato sea de auténtico… ¡escándalo! Y si te sobra (cosa que dudamos), aguanta bastante tiempo en la nevera (léelo más abajo en la sección de Consejos), e incluso se vuelve más sabrosa por el reposo de la salsa pesto, que le viene genial.

Variaciones de la receta de salsa pesto, casera y fácil:

La variante más conocida de la salsa pesto, que originariamente es de color verde, es el pesto rojo, de un color rojo intenso debido a la adición de tomates secos a esta misma receta. Además se le suele aportar un punto picante con un poco de guindilla, está también de… ¡escándalo!

Consejos:

Prepara una gran cantidad y consérvala en un bote hermético en la nevera, y procurando que la capa superior esté cubierta de aceite para que se conserve en perfectas condiciones. Podrás tenerla así varias semanas en la nevera, y cuando lleva unos días reposada es cuando más rica está 😛

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